domingo, 31 de julio de 2011

Solo, un hombre

Un hombre que ya no es parte del decorado
Un hombre que ríe con los ojos vacíos
Un hombre que destruye sus zapatos con el asfalto caminado
Un hombre que dejó de creer en Dios
Un hombre que sigue parado porque no siente los pies
Un hombre que nunca fue amado
Un hombre que arroja piedras hacia atrás para no golpearse
Un hombre que viaja solo
Un hombre que es sólo un hombre
Un hombre que no sabe jugar
Un hombre que intentó morirse y no pudo
Un hombre que corretea su vida deteriorada
Un hombre que nació hombre
Un hombre que no tiene pupilas de tanto llanto
Un hombre que morirá pronto
Un hombre que no conoció a nadie
Un hombre que sabe su nombre y su apellido
Un hombre que no conoce colores
Un hombre que alguna vez vivió mil experiencias
Un hombre que no sabe expresarse
Un hombre que está llegando a destino
Un hombre que nunca creyó en los cuentos de hadas...

martes, 26 de julio de 2011

Simpatía nocturna

Las hojas que rozan
el aire se escapa
de su altiva luna
que muere roja
en la noche

Diosa porque quiere
se hace carne
de algunos forajidos
que buscan ser dueños

de campos eternos
llenos de ocasos

búscame el día
tras la tarde
hecha polvo distante

se esparce por tus labios
rebozados de néctar
culmina el sueño
y te vibro anaqueles

brillantes rocas
en tus ojos
que fuego hacen
en tus adentros
extraños sentires
oscuros presagios
estando lejos
te veo
te veo
Estamos vivos.

sábado, 16 de julio de 2011

Desnuda y puta

Desnudase
dejando ver toda aquella pureza
que la hace santa,
abriendo su piernas muestra la gloria
camuflándose en pelusas
y letras desterradas.

Abrigase con la desmesura
de una recitada inconclusa
desbaratada por el alcohol
de algún promulgador idiotizado.

Y ella queda invicta
ante la muchedumbre que la observa
desangrándose por los poros
mientras todos comen su carne
simulando erudición.

Todos quieren lamer sus tetas blancas
con gusto a cielo, desean poseerla
con la belleza intacta

todo la perturba, y la hace puta.

Cuando las bocas sucias se callen
su néctar se perderá en el aire
inocuo cual despertar
efímero, noctambulo
dejando atrás a todo aquello que soñó
y no quiso.

Ellos hablarán como si supieran
lo sucedido
intercambiando frases
mezcladas con humos
para poder nombrarla
en una simple palabra...

Teodoro Duarte

viernes, 15 de julio de 2011

Un hombre que llueve, Gris.

Una página
de un libro antiguo
arrancada en sangre,
oxidada por lágrimas
de un elocuente
observador morboso,
que ya tiene el cierre bajo
y la mano jugueteando sobre su rodilla.

El día latiendo a su alrededor
con el suplicio de un corazón
devastado por el tiempo
y desamores, lloviéndolo por dentro.

Su opaca forma de percibir
lo hace sentirse neutro y "normal"
(Suponiendo que eso pueda llegar a ser algo),
y lo empuja hacia un vino berreta con gusto a moho
al que toma con gracia desbaratada.

Somnoliento,
desamparado,
vida hostil transitada,
y es una silla vacía frente a la ventana.
Es esa mañana que nace nublada:

los pastos mojados,
los colores resaltados,
las personas caminan cabeza a gachas,
las calles apestadas de barro.

El sufrimiento es una plaga
en él, que los días son penumbra
y un "quizás".

Los días le llueven parejo
cuando no sale de su habitación
nada se mueve, todo estático.

Algún día pensó en terminar con todo
lo que soporta, quiso salir a la calle,
y nada lo llena de fuerzas.

La lluvia lo corroe por dentro...


Teodoro Duarte.


martes, 12 de julio de 2011

Caballos en la neblina

Esta poesía nace a partir de un incendio en las zonas aledañas a mi casa. La noche fría se había puesto sobre el cielo, se veían las estrellas, pero con el paso del humo se iban escondiendo. Salí a la vereda de y noté el cielo espeso. El aire colmado de ruidos, ladridos, sirenas y no sé cuanto sonido alarmante más. Miré algunas veces más, buscando alguna señal que me lleve al lugar del incendio y lo que pude percibir fue el humo introduciéndose en la niebla, creando una escala de grises con la densidad única que nos da la humedad.




Una sirena agonizante
parte la noche repleta de niebla,
fría, obsecuente y atravesada como por una flecha.

Violentamente salta el autobomba,
despedazando partes del asfalto
con su sirena agonizante
intentando llegar al destino a tiempo
llevando consigo las miradas atónitas de los transeúntes.

Esperanzas hidráulicas
se apoderan de nuestras lágrimas
mientras el hedor a humo
se entrelaza con el aceite derramado,

oxigenado,
atascado de sensaciones magras
buscando algo en el cielo que me llene de estrellas.

Llantos se escuchan,
con el latir prolongado del silencio.

Cielo, gris, negro blanco,
negro y blanco,
negro.
Blanco. El aire rojo.

Gritos traspasan la carne,
disecando el sonido
que reside en nuestras caras.

El fuego incendia en totalidades,
calienta los huesos
y quema la sangre.
La respiración se agita.

Imágenes displicentes
haciendo en reencuentro gris
con la emancipada cara del frío que nos invade
dejándonos marcados con el fuego
que recorre con su fulgor por nuestra visión.
Hoy somos caballos,
mirando hacia adelante,
mirando el punto
en el cual vemos sumergiéndose
el humo negro en la densa noche.

Un momento más
tirado de los pelos hasta el cuajo,
los bomberos llegaron a tiempo.
Una familia, a partir de ahora,
dormirá en la calle...

Teodoro Duarte.


miércoles, 6 de julio de 2011

Participá de la Revista.

¡Atención! Comenzamos una selección de textos (poesía, relatos, etc.) para publicar en formato papel de manera mensual. Esta publicación se distribuirá en distintos eventos culturales y se enviará gratuitamente a los autores publicados. Dicha selección estará a cargo de Danilo Zárate Pacheco (Autor de este blog) y Matías Berrondo, autor de los blogs Las bocas de la voluntad y El Guacho Martín Fierro

Podés enviar tus textos a infiltrame_nectar@yahoo.com.ar

Si querés podés adjuntarnos la dirección de tu blog o sitio y una mini biografía para que sean incluidos en la publicación.

La participación en esta publicación es gratuita y no consiste en ningún tipo de publicación cooperativa ni nada por el estilo.

Cualquier consulta realizala a nuestro mail o acá mismo por los comentarios del blog

Gracias.

domingo, 3 de julio de 2011

Borrachera trascendental.

Vayase en la noche
bajo el silencio de las montañas,
inclinándose para no ser visto
por los ojos de la luna.

Tome el camino más oscuro
y no dé dos veces el mismo paso.
No mire hacia atrás.

No deje de mirar el suelo,
todo llamará su visión
y usted será atraído.
Lobos perseguirán su carne,
usted desesperará
y llegará el sol.

El sol derretirá sus lágrimas,
hervirá su sangre y lo hará parte del día.

Se convertirá en luz,
irradiará con la fuerza de la vida
y despejará de toda impureza.

Entonces pasarán años por tu rostro,
creando surcos de madera,
donde tus llantos crearán ríos.
Esparciendo toda la sal por tu cuello
intacto de placeres,
ahogándote en la misericordia
contracturada de un Dios infiel.

Vivirás muchos años
estático entre la maleza del bosque,
no tendrás escapatoria
en aquel momento, ni siquiera en éste...


Teodoro Duarte